Tampoco existen las emociones buenas y malas.

Cuanto tenemos emociones que no son placenteras, decimos que estamos “mal” o que tenemos emociones “negativas”. ¿Por qué?

Las emociones en realidad simplemente son mensajes de nuestros  sentidos y del sistema límbico para que actuemos

Las emociones son información diseñada para evitar el dolor y buscar placer. En otras palabras, es una función para hacernos sobrevivir.

El problema de ver las emociones como negativas, es que las vemos como enemigas.

Cuando sentimos algo que no es felicidad o placentero, creemos que está mal y buscamos huir de eso.

Al tener esta visión, creemos que cuando nos sentimos “mal” tenemos que evitar la emoción.

Buscamos adormecer la emoción con placer instantáneo.

El problema es que la emoción no desaparece, sólo se pasa al subconsciente.

La emoción no se reprime, se oculta o se combate.

La emoción es un mensaje diseñado para sentirlo, cuestionarlo, entenderlo y crear cambios.

El problema no es sentir emociones, el problema es la forma de manejar esas emociones.

En vez de decir me siento “mal”, puedes probar decir me siento enojado, triste, frustrado, estresado o tengo miedo.

Nombrarlas en vez de etiquetarlas como buena o malas hace que puedas entenderlas y manejarlas.

Está bien estar triste, con miedo o enojado.

Está bien observar y entender de dónde viene. Es la única manera de que las circunstancias en nuestra vida cambien.

En vez de sentir enojo y reprimirlo con videojuegos para luego explotar por algo más grande, es mejor sentir ese enojo, ver de dónde viene y cuestionarnos por qué lo sentimos.

Creemos que la gente exitosa y feliz no tiene emociones desagradables y todo el tiempo está bien. ¡Eso no es cierto!

La adversidad y las emociones no placenteras son inevitables.

La diferencia es cómo lidiamos y reaccionamos ante esa emoción.
Tal vez la meta no es buscar ser felices, tal vez la meta es buscar ser plenos.

Eso nos da permiso de estar tristes en cierto momento y aún así poder sentirnos plenos.

¡Está bien sentir!


¿Quieres conocer tus emociones mientras conectas con la gente que te importa?

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