Spoiler: a veces es bueno.

En esta época la sociedad ve como algo negativo el hecho de conformarse.

En ninguna era se ha tenido un mundo tan lleno de posibilidades.

  • Miles de opciones de entretenimiento.
  • Cientos de opciones de pareja en aplicaciones de citas.
  • A un click puedes comprar miles de cosas.
  • Puedes cambiar de trabajo o puedes mudarte rápidamente.

Con tantas opciones tenemos la idea de que la vida es muy corta para conformarse.

Ahora vivimos en una cultura que prioriza las experiencias del momento,  en vez del compromiso a largo plazo con algo.

Toda esta cultura de opciones, ha impactado negativamente nuestra forma de ver las relaciones.

Vemos mal a las parejas que se conforman y permanecen juntos solo por compromiso.

Si no son 100% felices y se quedan juntos por los hijos, por miedo a la soledad o por miedo a que no habrá nadie mejor afuera, juzgamos y criticamos.  

Creemos que siempre habrá una mejor opción y habrá una opción libre de dolor donde serás completamente feliz.

¿Qué tal si eso no es cierto? ¿Qué tal si en realidad no tenemos tantas opciones?

¿Qué tal si nos falta el carisma, la personalidad, el aspecto o la confianza para tener muchas opciones?

¿Que tal si en realidad cualquier pareja viene acompañada de ciertas dificultades?

Tal vez la situación en la que se está no está mal. Es cierto, requiere trabajo y compromiso, pero también tiene aspectos muy positivos.

El acto más radical que podemos hacer en esta época es comprometernos: con un lugar, una profesión o una persona.

No me malinterpretes, tener estándares altos, tener bienestar y siempre buscar mejorar es muy importante, pero llega un punto en el que te tienes que compr ometer.

La sociedad tiene la profunda creencia que si tienes más opciones y más libertad habrá más felicidad.

Lamentablemente, la ciencia comprueba lo contrario.

Barry Schwarz, un profesor UC Berkeley y autor del libro “La Paradoja de la Elección” hizo experimentos comprobando que mientras más opciones se tiene, la gente es más infeliz.


¿Por qué más opciones te hace infeliz?
  1. Porque te da parálisis de opción.

Tienes tantas opciones que acabas no eligiendo

Te cuesta mucho, se vuelve exhaustivo y te aburres.

Ejemplo: te quedas en el menú de netflix 30 o 40 minutos y acabas sin ver nada.

2. Con tantas opciones, elevas las expectativas y sufres con la realidad.

3. Una vez que tomas una decisión, te atormentan los caminos que no tomaste.

Comparas constantemente e imaginas las elecciones que no elegiste.

Si los beneficios son tan obvios, ¿por qué nos cuesta tanto comprometernos?

Por miedo a perderse oportunidades. Miedo a despertarse un día y sentir que debimos de haber elegido diferente. Miedo al peso de tomar una gran decisión.  

La realidad es que una vez que te comprometes, disfrutas y aprecias más tu decisión. Ves la elección con nuevos ojos.


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