1.Acepta con humildad tus errores y sombras

Ambas personas tienen que estar dispuestas a crecer y mejorar.

Un problema o situación siempre es responsabilidad de dos partes.

Tenemos que entender que la otra persona sirve como nuestro espejo.

Aquello que nos molesta refleja algo que tenemos que trabajar.


2. Observar las sombras de la persona

Para elegir y compartir con alguien, ambas personas tienen que ser conscientes de las sombras del otro.

No ver o aceptar las sombras nos puede hacer daño, porque los problemas se van acumulando. Ver las sombras permite que haya enseñanza mutua, un aspecto clave  para lograr una relación sana y plena.


3. Abordar sanamente los problemas

La sociedad está muy acostumbrada a evitar confrontar problemas.

Es importante no tener miedo de hablar de los problemas para sanarlos.

El conflicto no lo da la adversidad, lo da nuestra manera de abordarlo.

Cuando ambas partes toman responsabilidad y hay apertura es muy sano dialogar los problemas para que no se acumule y haya bloqueos.

No es uno contra el otro, son los dos contra el problema.  


4. Elegir a la persona día a día

La relación es como una planta, hay que regarla constantemente para que crezca.

Cada día es una oportunidad para conocer algo nuevo y compartir con esa persona.

La vida es efímera. Cada día hay que estar agradecidos por la oportunidad de coincidir.

Es importante crear momentos para tener tiempo de calidad y constantemente traer entusiasmo y energía a la relación.


5. Confianza y elección

Cuando se siente confianza, paz y  tranquilidad es muy evidente y fluido. En una relación sana y plena no hay duda de que la otra persona te elige.

Es importante ser capaces de dar esa misma elección que esperamos.

En una relación sana hay comunicación, honestidad y apertura.


6. Eleva tu estado emocional

En una relación sana hay 5 interacciones positivas por cada negativa. No siempre será todo diversión, pero en una relación plena los momentos buenos son más. Pasar tiempo juntos eleva tu energía.


7. Elegir desde el amor propio y libertad

Ambas personas tienen que sentir amor propio, sentirse completos y plenos de manera independiente. Cada quien tiene que tener su propia vida y está bien.

Tener tiempo a solas y una vida independiente es lo que los hizo ser las personas que son y por eso se enamoraron.

Tener individualidad permite que ambos sigan creciendo como personas y por lo tanto sigan conectando.


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