1.Acepta tu responsabilidad

La responsabilidad de un conflicto no siempre es compartida en términos iguales.

Los porcentajes de responsabilidad pueden variar y una persona puede ser más responsable que la otra.

Sin embargo, la responsabilidad de un conflicto suele ser compartida.

Cada persona tiene sus propias necesidades, deseos, emociones y heridas.

Lo más común es que las parejas conecten buscando cubrir sus necesidades y por lo tanto se activan mutuamente sus heridas.

A veces la responsabilidad del conflicto puede ser sólo la forma en la que decimos algo o cómo interpretamos una situación.


2. Trabaja tus heridas y defectos

¡Todos somos difíciles de alguna forma!

Paradójicamente, somos personas más fáciles cuando lo reconocemos, aceptamos y trabajamos para mejorar.

Si no te haces cargo de tus heridas, vas a sangrar sobre tu pareja y la relación.


3. Haz lo que hiciste al inicio

Tony Robbins repite a menudo esta frase:

“Si haces lo que hiciste al inicio, tu relación no tendrá final”.

Claro, al inicio es más fácil porque hay enamoramiento. Posteriormente se necesita una elección de amar y esfuerzo constante.

Se necesita crecer y limpiar todos los bloqueos que impiden amar como se hizo al inicio.


4. Hazte consciente de la energía y emociones que estás trayendo a la relación.

Nuestra relación es el resultado del ambiente en el que se crea la conexión.

Si constantemente estás estresado, de malas o triste, estás llevando y acumulando esa emoción a la relación.

Procura conectar desde espacios de gratitud, amor y felicidad. La relación es un tercer ente y es un reflejo del estado emocional de ambos.


5. Busquen cambios, nuevas experiencias y ambientes

El ambiente y los espacios tienen una gran influencia en nosotros y lo subestimamos.

El ambiente impacta nuestro estado emocional y a su vez nosotros impactamos la relación.

Cuando cambiamos de espacios y experiencias también estamos cambiando patrones y hábitos.

Nos damos espacio para conectar siendo otros.


6. Cuestiona tus expectativas

Creemos que la relación se debería de ver de cierta forma, debemos recibir cariño de cierta forma, deben de pasar ciertas cosas o debe actuar de cierta manera.

Todos tenemos creencias y expectativas respecto a las relaciones que podemos cuestionar para evitar decepciones y conflictos.

Las expectativas suelen ser poco realistas o injustas y si las cuestionamos podemos comunicarlas para que no haya problemas.


7. Olvida el romanticismo

Se nos enseño en películas, series y libros que una vez que conoces a tu persona ideal todo debería ser perfecto.

El romance y el enamoramiento no es suficiente. Habrá conflictos, tu pareja será difícil de repente y siempre habrá enamoramiento o “ganas” de amar.

La relación necesita esfuerzo, crecimiento de ambos, cambio constante y cuestionar nuestras heridas y defectos.


¿Quieres volver a crear un ambiente de entusiasmo y aprecio en la relación?

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